LA REINA RUMBA…
Ya estuvieron en la ‘pantalla
chica’ historias como la del Joe Arroyo y recientemente la de Niche, aunque
bastante lejos de lo que podría ser la vida real y fidedigna de las biografías
de estas personalidades; incluso, la historia de Niche fue basada en la música
de la agrupación, más no en la vida ni de Varela ni de la orquesta como tal.
Ahora el turno es para Celia
Cruz, la guarachera de Cuba, la reina rumba, la
más grande intérprete de la música afrocaribeña. Y ahí no podía haber
‘descache’, puesto que no iba a ser aceptable, ya no más, una historia
inventada o ficticia, “salida de la imaginación de los libretistas”. No, no
podía ser así y por fortuna lo entendieron quienes están al frente del proyecto.
La vida de Celia es un ejemplo
de tesón, de ganas de ser alguien, de humildad, de verraquera, de sentido
humanitario, pues a pesar de su gran éxito, nunca se le vio en excesos… bueno,
sin meter en este renglón su maquillaje y su vestuario, siempre estrafalario,
sorprendente y muy característico de su personalidad alegre y arrolladora.
En las líneas de los libretos y
puesta en escena, se nota el trabajo de investigación de casi dos años
realizado por la producción; buscaron detalles chéveres, notorios y
significativos, sin llegar a desnudar la imagen de la artista. Ese toque que ha
faltado en otras producciones donde se altera y se juega con la personalidad y
se desdibuja la figura pública de quienes inicialmente son homenajeados y
terminan siendo señalados.
Algo que me ha llamado la
atención y que quiero destacar, es el ingrediente musical, un trabajo extenso e
impecable realizado para acompañar la producción, puesto que hubo necesidad de
hacerla nuevamente en su totalidad. ¿Se imaginan ese deleite para los músicos
que intervinieron? Interpretar la música de “El decano de los conjuntos de
Cuba” debe ser un privilegio, y la presencia de una figura como Alfredo De La
Fe es sello de garantía, porque la vivió, la estudió y además acompañó a Celia
en muchas grabaciones y presentaciones, sin contar que es uno de sus ahijados
más queridos.
Seguiré viendo la historia de
Celia, esperando que continúe por ese camino y no se vaya a desviar gracias
al ‘ingenio’ de quienes a veces
destruyen las buenas historias.
CAJA BIOGRÁFICA
Su nombre de pila era Úrsula
Hilaria Celia de la Caridad de la Santísima Trinidad Cruz Alfonso. Nació en La Habana, Cuba, el 21 de octubre de 1925 y falleció en Fort Lee, Nueva Jersey, Estados Unidos, el 16 de julio de 2003. Cantante de la Sonora Matancera, luego de lo cual
emprendió una trepidante carreras como solista recorriendo casi todo el mundo
con su poderosa voz.
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