GRAN RECONOCIMIENTO PARA EL GRUPO NICHE

La Revista Billboard, una de las publicaciones más importante del mundo especializada en temas musicales, ha declarado a ‘Cielo de tambores’, del Grupo Niche, como uno de los álbumes esenciales de la música latina de los últimos 50 años, ocupando la casilla número 21 del selecto listado donde se destacan agrupaciones de todos los géneros del continente.

El álbum, publicado a finales de 1990, ha sido inolvidable para el grueso del público latino y sus canciones se convirtieron en éxitos en casi todo los continentes. Fueron ocho temas los grabados en dicha producción, por el Lado A: Cielo de tambores, Una aventura, Se pareció tanto a ti y cierra Doña Pastora; por el Lado B se encuentran: Busca por dentro, Debiera Olvidarla, Sin sentimiento y el exitazo Cali ají.

En la producción musical participaron Álvaro ´Pelusa’ Cabarcas  (piano), Raúl Umaña (bajo), Richie Valdés (Teclados), Denilson ‘Pato’ Ibargüen (congas), Iván Sierra (bongó), William Valdés (timbal), Danny Jiménez (trompetas 1 y 2), César ‘Albóndiga’ Monge, Gonzalo ‘Lobo’ Palacio y Andrés Viáfara (trombones), y las voces de Charlie Cardona, Javier Vásquez y Richie Valdés.

En este trabajo se destacaron las participaciones en el tema Sin Sentimiento de Sergio George (arreglos), Johnny Torres (bajo) y Diego Galé (congas), siendo además el primero que fue grabado totalmente en el estudio propiedad de Jairo Varela, Niche Estudios Profesionales, en la ciudad de Cali.

La carátula de ‘Cielo de tambores’ quedó grabada en la memoria de los ‘nichemaníacos’, pues plasmaba la pluma de un escritor trazando notas sobre el pentagrama y las siluetas de Tito Rodríguez, Charlie Palmieri, Beny Moré e Ismael Rivera, cuatro de las más grandes figuras del folclor afrocaribe en todos los tiempo y cuyas obras de una u otra forma influenciaron el crecimiento musical del maestro Jairo Varela.


La producción de este legendario álbum es una de las más brillantes creaciones del genio musical del maestro Varela quien, quien demostró su vasta capacidad para escribir letras y componer melodías. Un reconocimiento más para el más grande  de las figuras de la salsa colombiana. Por supuesto, es uno de los que guardo en mi maleta musical.

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